Luis nos cuenta cómo la enseñanza de la Biología es significativa utilizando el método Cornell

Luis Jaime Gonzalez Fajardo

5/23/20252 min read

El currículo oficial de la práctica está centrado en el aprendizaje técnico y científico de la biología, utilizando el Método Cornell como estrategia pedagógica principal. A través de la toma de apuntes organizada, los estudiantes desarrollan habilidades de comprensión, memorización y análisis de conceptos teóricos y prácticos en biología. El método científico se aplica en las prácticas de laboratorio, en donde los estudiantes comprueban y validan los conceptos aprendidos, lo que refuerza una pedagogía académica y erudita. El currículo explícitamente busca transmitir conocimientos científicos estructurados, con énfasis en la precisión, la objetividad y el orden. Aunque el diseño de la práctica sugiere cierta participación activa de los estudiantes (como la extracción de conceptos clave y la resolución de problemas técnicos), esta participación está muy orientada y limitada por los marcos curriculares. El docente guía la toma de apuntes y la experimentación, lo que subraya una relación docente-estudiante de control, en lugar de promover una auténtica autonomía crítica en los estudiantes. Los estudiantes son sujetos de aprendizaje, pero el espacio para la creatividad o la reflexión crítica es restringido, dado que deben adherirse estrictamente al formato del Método Cornell y al enfoque científico tradicional.

Como señalaba Paulo Freire en su crítica a la educación bancaria, este enfoque puede estar limitando la capacidad de los estudiantes para ser sujetos activos en su aprendizaje y para cuestionar los contenidos y los métodos de enseñanza impuestos. Si bien el aprendizaje técnico y científico es esencial, un currículo más transformador podría incorporar más espacios de reflexión sobre los impactos sociales y éticos de los conocimientos científicos, promoviendo así una educación más crítica y liberadora. Incorporar temas de justicia social, equidad y participación sería clave para enriquecer este currículo, integrando a los estudiantes como agentes transformadores de su contexto.

En conclusión, los aprendizajes centrales de esta práctica de Biología se centran en el desarrollo de competencias científicas, técnicas y de precisión en el ámbito de la biología celular, genética, y el comportamiento animal. El currículo, en su enfoque actual, tiende a favorecer una visión académica-erudita que limita la posibilidad de que los estudiantes se involucren en una reflexión crítica y contextualizada. La ausencia de un enfoque de reconstrucción social en la práctica limita el desarrollo de los estudiantes como ciudadanos críticos que puedan aplicar sus conocimientos en la resolución de problemas sociales o en la comprensión de las dinámicas sociopolíticas que subyacen a los temas biológicos. Esto pone de manifiesto la necesidad de integrar una visión pedagógica más inclusiva y transformadora que fomente el aprendizaje de contenidos, al mismo tiempo que la reflexión crítica sobre los mismos, alineándose con los postulados de Freire.